La ceremonia del vasallaje

La ceremonia del vasallaje tiene lugar solo entre los grupos privilegiados y se divide en dos partes principales: el homenaje y la investidura. Esta ceremonia está llena de símbolos. Observa atentamente la imagen que tienes a continuación. 

Ceremonia del Homenaje

Esta imagen representa la ceremonia del homenaje, que se inicia con la humillación o arrodillamiento del vasallo, que solicita ponerse al servicio del señor. Éste le acepta rodeando sus manos con las suyas. El vasallo entonces pronuncia un juramento de fidelidad y el pacto se sella con un beso. 

La segunda parte de la ceremonia era la investidura.  En ella, el señor hacía entrega de un objeto, que podía ser un puñado de tierra, unas flores, un anillo, como símbolo del feudo que daba al vasallo. Los feudos podían ser cobros de rentas, de impuestos..., pero lo más habitual es que fueran tierras. 

A continuación tienes dos textos que te ayudaran a entender mejor todo este proceso. 

“El conde preguntó al futuro vasallo si quería convertirse en su hombre y aquél le contestó: Lo quiero, después, juntando las manos que el conde cubrió con las suyas, se aliaron por un ósculo. El hombre prometió fidelidad en estos términos: Prometo por mi fidelidad ser fiel al conde y guardar contra todos y enteramente mi homenaje, de buena fe y sin engaños”

Rito de vasallaje. Galberto de Brujas, siglo XII

“En nombre del señor, Yo, Rogelio de Besiers, te doy en feudo a ti, Arnaldo de Corleano y a tus descendientes y os entrego el castillo para que lo tengáis en feudo mío, salvo mi fe, mis derechos señoriales y mi justicia. Año 1138 de la Encarnación del Señor”

Concesión de un feudo. 1138