Los lagos son acumulaciones naturales de agua dulce dentro de un continente. Si son de tamaño reducido se denominan lagunas. No todos los lagos o lagunas se forman de la misma manera, algunos tienen origen volcánico o tectónico (fuerzas internas de la tierra) otros son el resultado de la acción de los agentes externos, como los lagos glaciares.
El origen de sus aguas también es diverso; puede proceder de las precipitaciones, de los ríos o de las aguas subterráneas.
Como ya sabes, más de una quinta parte del agua dulce de planeta se encuentra bajo tierra en acuíferos y galerías. La mayor parte procede del proceso de infiltración que tiene lugar durante el ciclo del agua. Las aguas subterráneas pueden volver a la superficie en forma de manantiales o afloramientos naturales y muchas son accesibles a través de pozo. En épocas de sequía los acuíferos son un recurso hídrico imprescindible para el ser humano, pero su uso o explotación excesiva puede llevar a su agotamiento.
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